¿Qué debes saber si eres un #PetParent primerizo?
Los perros quizá sean las mascotas más populares a nivel mundial. Los vemos a diario en memes, gifs, stickers y más. De seguro, esa fue una de las razones por las cuales decidiste por fin tener uno en tu hogar. Pero sabemos que es un desafío y por eso queremos dejarte estos consejos para que esta primera experiencia como #PetParent sea un éxito.
1. Tu perro necesita su espacio… antes de conocerte.
Los cachorros adoran la convivencia con las personas. Les gustan las caricias, los juegos e incluso quedarse tirados sin hacer nada junto a sus dueños. Pero hacer estas cosas antes de tiempo, puede causar un daño enorme al aprendizaje asociativo esencial de tu pequeño amigo. Muy pocos lo saben y lo admiten, pero un perro necesita por lo menos 3 meses de convivencia con su madre y sus hermanos cachorros (si los tiene) antes de separarse de “la manada”. Basta con preguntarse ¿Quién puede entrenar mejor a un perro que otro perro? Así de simple. Los primeros días con su madre definirán lo fácil que sea adiestrarlo en el futuro, ya que ella le enseña, entre otras cosas: ¿qué tan fuerte morder?, ¿qué cosas no comer? y ¿cuándo ya es hora de descansar? Entonces si tienes la posibilidad, permite que tu perro se siga juntando con su “manada” durante un tiempo más, así será educado con mayor facilidad. Después de todo, siempre hay que hacerle caso a mamá.
2. Date tiempo para jugar con él
No hay perro que quiera estar tirado en el suelo todo el día, por más perezoso que la genética de su raza lo haya hecho. Si eres una persona ausente, con muchos compromisos después del trabajo y reuniones sociales los fines de semana, será mejor planificar mejor tu agenda para darle el tiempo que se necesita a tu mascota. Lo primordial es involucrar a todas tus amistades y familia con el nuevo miembro de tu vida, de modo que incluso compartir tiempo con ellos no implique no estar tiempo con tu perrito. También si tu pequeño amigo los va conociendo, en caso de que tú no puedas estar por algún motivo, se sentirá muy a gusto de que ellos lo cuiden y le hagan compañía. Otro consejo importante es buscar espacios para salir, pasear y jugar. A los perros les gusta estar en lugares abiertos para moverse con toda libertad. Si él gasta sus energías en una mañana deportiva, tú podrás salir con más calma por la tarde a tomarte un café con tus amigos. Tus amigos humanos, claro está.
3. Tu perro no habla español
Cuando se trata de mascotas, a veces cosas que creemos “obvias” dejan de serlo. Una de ellas es que muchos #DogPersons creen que su perro les entiende cada cosa que hablan. No se vayan a desilusionar, pero no es así. Tu perro te comprende por las asociaciones que hace entre sus conductas, tus conductas y tus palabras, en una determinada situación. No, no es porque hable español. De hecho para él, tus palabras no son más que sonidos que dejan de ser aleatorios cuando le recuerdan algo. Por eso si haces un sonido para llamarlo y salir, lo tiene presente de inmediato. Teniendo en cuenta esto, lo más importante para hablar con tu perro es la modulación de voz. Si le dices por ejemplo “ahí no se hace eso” con un tono amigable, no hará efecto en él. Asimismo, si le gritas desesperadamente “eres el amor de mi vida” probablemente piense que estás enojado. El tono lo es todo. Entonces afina tu garganta y no confundas a tu perro.
4. Ante la duda, siempre el veterinario
Las personas tenemos la mala costumbre de que ante cualquier molestia física mínima, le pedimos a Google un diagnóstico. Acto seguido, pensamos que nuestro dolor de garganta es una enfermedad degenerativa y resolvemos el “problema” de cualquier forma menos la correcta. Puedes hacer eso contigo, pero no lo hagas con tu amigo de cuatro patas. Muchas veces, nuestras mascotas se sienten incómodas o aturdidas en un entorno y lo trasladan a sus expresiones. Su reacciones pueden ser símbolo de un simple temor al motor de una motocicleta o de una grave molestia digestiva. Con los perritos, no vale la pena especular y lo mejor sería siempre consultar con un veterinario. El internet no es muy seguro para las mascotas. No vaya a ser que cuando nos decidamos a ir al médico, su enfermedad esté muy avanzada. La ventaja es que hoy en día, puedes contar con servicios como Pet Phone, una suscripción que incluye llamadas ilimitadas 24/7 para consultar dudas sobre tu mascota a un veterinario certificado.
En definitiva, tener un perro es un desafío, más complejo de lo que nos lo pinta internet. Implica constancia, tiempo y sobre todo, conocimiento de los mejores servicios para cuidar al nuevo integrante de tu vida. Suerte en esta aventura, #PetPerson.